Rehabilitación
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Tratamiento del síndrome del parabrisas con WINBACK

Tratamiento del síndrome del parabrisas con WINBACK

DEFINICIÓN DEL SÍNDROME DEL PARABRISAS

Iliotibial band syndrome, sometimes referred to as the “windshield wiper effect” is a condition that typically afflicts long-distance runners and cyclists. It is a common form of tendinopathy caused by repeated muscular abrasions during low flexion extension between the rear edge of the iliotibial band and the external condyle, resulting in an inflammation of the iliotibial tract, typically accompanied by pain in either the lateral aspect of the knee or opposite the external condyle. However, the condition does not universally have a mechanical origin and it may also have an idiopathic cause or be due to primary serous bursitis.

DIAGNOSIS OF ILIOTIBIAL BAND SYNDROME

El síndrome de la cintilla iliotibial o más comúnmente conocido como síndrome del limpiaparabrisas es una afección característica de los corredores de fondo y de los ciclistas. Se trata de una tendinitis común que aparece debido a un problema repetido durante los suaves movimientos de flexión y extensión entre el borde posterior de la banda iliotibial y el cóndilo tibial externo. Esto produce una inflamación del tracto iliotibial acompañada de dolor típico en la parte delantera de la rodilla donde se encuentra el cóndilo externo. Sin embargo, el origen mecánico no es sistemático y puede que sea idiopático acompañado con una bursitis primaria.

DIAGNÓSTICO DEL SÍNDROME DEL LIMPIAPARABRISAS

El diagnóstico del síndrome del limpiaparabrisas es principalmente clínico y puede confirmarse a través de varios ensayos clínicos (Prueba de Renne o Prueba de Noble). El dolor puede aparecer cuando se aplica esfuerzo sobre un lado del muslo. La palpación del dolor en el cóndilo lateral a veces viene acompañada de una sensación de bursitis. El diagnóstico diferencial incluye: un daño externo del menisco, una patología de la articulación tibifibular proximal, una fractura por estrés en el cuello del peroné, una condropatía femorotibial externa, y finalmente una tendinitis del bíceps o del poplíteo.

LOS TRATAMIENTOS ACTUALES DEL SÍNDROME DEL LIMPIAPARBRISAS.

Los tratamientos actuales que se ofrecen actualmente son, en fase aguda, el reposo, colocación de hielo y fisioterapia para una recuperación deportiva infra dolorosa. Cuando desafortunadamente se vuelve crónico, existen tratamientos médicos que son costosos pero a veces ineficaces. Por lo tanto, se recomienda realizar infiltraciones de corticoides (justificadas en vista del contexto inflamatorio de fricción), y más recientemente, terapias con PRP. Cuando el paciente no encuentra una solución terapéutica, lo último que puede hacer de manera invasiva es recurrir a la cirugía (se extirpa la porción de tejido afectado). Tradicionalmente, la fisioterapia logra tener resultado.

La relajación de la banda fibrosa, el fortalecimiento de los glúteos, la propiocepción, y finalmente, la analgesia, son las principales líneas terapéuticas. Pero el problema principal es llegar de manera no invasiva a los diferentes tejidos conectivos. La combinación de múltiples técnicas motrices, mecánicas (esfuerzo, MTP, mayor tensión, ventosas, etc.) debe ir de la mano con la búsqueda del alivio inmediato del dolor.

Por tal motivo, ¿cómo liberar sin dolor las tensiones de los tejidos utilizando técnicas manuales (reorganización del tejido conectivo) para optimizar el trabajo propioceptivo y recuperar los movimientos deportivos de manera óptima?

Frente a estas preguntas, muchos terapeutas (más de 500 en Francia) se están cambiando desde hace 2 años de manera pragmática a una nueva tecnología que se basa en la emisión de energía a alta frecuencia que normalmente se conoce como tecarterapia. Esta tecnología permite aumentar los intercambios intra y extracelulares, al igual que mejorar el metabolismo a nivel local. Durante la sesión, esta actividad biológica se complementa con los conocimientos del terapeuta.

Las opiniones de los diferentes profesionales alcanzan más de un 95% de satisfacción terapéutica. Nuestros colegas reanudan su actividad más rápidamente (por lo general en menos de ocho semanas lo cual puede constatarse en los registros) y disminuye significativamente la recurrencia. Tome en cuenta que al igual que con cualquier terapia manual, el movimiento depende del operador, apenas se considera un estudio clínico a gran escala.

Para contemplar todas las técnicas manuales de rehabilitación validadas por el mundo de la medicina, Winback ® tiene la capacidad de ofrecer distintas soluciones técnicas para el terapeuta, lo que lo ayudará a tener un movimiento manual libre e intuitivo. De esta manera, el departamento de investigación y desarrollo, junto con la ayuda de los especialistas, ofrece diversos accesorios, electrodos y frecuencias de emisión.

El protocolo de tratamiento se adapta según la observación y experiencia del terapeuta pero respeta las principales directrices técnicas para llegar a todos los tejidos afectados. El paciente siente un calor reconfortante llamado diatermia, aumentando así la vascularización local. Este calor endógeno con la activación del tejido se adapta de acuerdo a lo crónica que sea la inflamación. Por lo tanto, sería interesante buscar temperaturas más persistentes en los tejidos con poca o mala vascularización (entesis, inflamación crónica, etc.).

PROTOCOLO TERAPÉUTICO RECOMENDADO

Un modo capacitivo permite en principio, a través de distintas frecuencias, tratar todos los tejidos blandos de forma local e instantánea. En el contexto del síndrome del limpiaparabrisas, esta aplicación capacitiva a través del masaje se llevará a cabo de 4 a 5 minutos en todos los músculos periarticulares, pero más específicamente delante de la parte externa del segmento femoral hasta los muslos. El modo Capacitivo Profundo llega incluso a lo profundo de la bursa mediante el efecto analgésico, bien sea primaria o secundaria.

Un modo resistivo permite una solicitación poliarticular. Lo resistivo se induce según el impedimento del tejido solicitado a través de enfoques dinámicos y manuales. De tal manera, gracias a una amplia gama de electrodos móviles y fijos, todas las técnicas bien sean manuales, mecánicas pasivas o activas son compatibles con el modo resistivo.